Para la familia Wyss, la caza es un elemento natural de la vida cotidiana. En esta historia, el director de cine y cazador Mario Theus habla de Manuel, el padre, Katja, la madre, Lorenz, el hijo, Julia, la hija, y el perro de caza Kronos, a quienes une su pasión por la caza.
Una pasión compartida
La caza del cérvido
Los corzos despiertan una mágica atracción en toda la familia Wyss. Padre, madre e hijos salen juntos en busca de aventuras por el bosque, el hábitat de los cérvidos. Al quinto miembro de la familia, el perro de caza Kronos, también le encantan los cérvidos —aunque, para ser más exactos, le encanta rastrear su olor—.
En invierno y primavera, la familia Wyss disfruta del aire libre y observa a los cérvidos, una experiencia que siempre es diferente, por lo que nunca hay momentos aburridos. A partir de mayo, además de observar, también cazan. En las tardes de verano, Katja y Manuel esperan en el puesto a que pasen los corzos. Normalmente también les acompañan sus hijos y Kronos. El momento estelar de esta familia de cazadores llega en otoño.
Objetivos comunes
De caza con Kronos, el sabueso suizo
A partir de octubre, toda la familia sale unida a explorar el terreno. El perro de caza Kronos es el protagonista de estas aventuras: conduce a los cérvidos mientras la familia espera pacientemente en sus posiciones. En muchos casos, solo consiguen avistar al cérvido. Pero estas cacerías otoñales son momentos muy especiales, ya que toda la familia pasa el día en el bosque cazando junta, comiendo, compartiendo los logros de la caza, disfrutando de los avistamientos y sintiendo la pasión incontenible del perro de caza.
Momentos compartidos
Madre e hija
Katja Wyss disfruta con su hija Julia de la naturaleza y la caza durante todo el año. Para Julia, pasar la tarde con su madre es una experiencia muy especial. Durante el trayecto al puesto, Julia participa activamente y utiliza los prismáticos para otear la linde del bosque. El mejor momento para Julia es cuando divisa un corzo. Tanto si se trata de un cervatillo como de un majestuoso corzo, Julia se queda embelesada con cada avistamiento. Aunque aún no tiene muy claro si algún día querrá ser cazadora.
Pero en cuanto su madre, Katja, apunta con su rifle, es evidente que Julia también es una cazadora en ciernes. Cuando la emoción aumenta o su madre consigue cazar una pieza, Julia rebosa de emoción ante lo que ha conseguido. Y, aunque no haya animales a la vista, a Julia le encanta quedarse en el puesto o en un bosque otoñal bajo la lluvia. Compartir estos momentos con su madre, con toda la familia y con Kronos es un momento muy especial para Julia.
Acerca de
Mario Theus
Mario Theus es un apasionado de la caza licenciado en Ingeniería Forestal por la universidad ETH de Zúrich. Sus habilidades con la cámara y la filmación son autodidactas. Trabaja como director de cine independiente y ha fundado la productora Palorma GmbH. Como amante de la caza de montaña, el senderismo y el cine sobre la naturaleza, busca constantemente lugares mágicos y nuevas historias.