El 20 de noviembre es el Día Universal del Niño. Tal día de 1989, la Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó la Convención sobre los Derechos del Niño, que declara el derecho fundamental de todos los niños a la salud, la educación, la igualdad, el bienestar, el ocio y la libertad de expresión. Estos valores esenciales también han desempeñado un importante papel en la creación del centro Wichtelwald de SWAROVSKI OPTIK. La guardería de la empresa abrió sus puertas en 2008 y amplió sus instalaciones en 2012, ante la ingente demanda y la acogida eminentemente positiva. Los tres grupos de Wichtelwald ofrecen cuidados para niños y niñas de entre uno y seis años de edad. De este modo, tanto la guardería como la escuela infantil brindan una perspectiva orientada a la naturaleza y apoyo individual para niños en sus primeros años de formación.
Con la oferta de cuidados infantiles y educación para todos los niños en edad preescolar en una ubicación céntrica de las instalaciones empresariales de Absam, en el Tirol, SWAROVSKI OPTIK ayuda a sus empleados a conciliar sus compromisos laborales con la vida familiar. El horario flexible de llegada y salida y los menús de alta calidad y de proximidad que se sirven en Wichtelwald facilitan la vida de las mamás y los papás que trabajan en SWAROVSKI OPTIK. Cerca de cuarenta niños y niñas disfrutan de una aventura diaria adaptada a sus respectivas etapas de desarrollo, bien en la guardería o en la escuela infantil, mientras sus progenitores trabajan. Educadores capacitados y cuidadores altamente cualificados ofrecen asistencia personalizada para los niños en estos primeros años de formación. Como lo resume una madre a la perfección: “Wichtelwald es como una familia para mí. Hace años que conozco a toda la gente de allí, que son mis compañeros. Dejo a mi hija en manos de personas de confianza, y sé que ella está feliz allí”.
See the unseen –
Estimulación de la expresión natural de los niños
Los conceptos, los equipos y el personal en todos los ámbitos de cuidado cumplen con los estándares educativos más exigentes. Se pone un especial énfasis en tratar a los niños con respeto y apreciación. Son ellos precisamente los que inician los procesos de aprendizaje, en función de los cuales se estimulan sus capacidades individuales. El aprendizaje abierto, que se centra en la creatividad individual y no se basa en actividades fijas para los niños, es el enfoque más próspero.
Según Jasper Juul, experto danés en educación y familia, para los educadores de Wichtelwald, la educación es, ante todo:
Además de sus amplias aulas interiores para actividades y su jardín, Wichtelwald dispone de su propio bosque; como reflejo del principio central de SWAROVSKI OPTIK, “See the unseen”, todo esto contribuye a despertar la curiosidad natural de los niños y la fascinación por el mundo natural inalterado, algo que solemos olvidar cuando somos adultos. Los niños respetan a los demás, así como a los seres vivos y al medioambiente, en todos los climas y en situaciones amenas. Al igual que ocurre con las actividades exteriores, los juegos y las estructuras de las aulas grupales están enfocados al descubrimiento con todos los sentidos.
Atención específica hasta la edad escolar
Las atenciones ofrecidas en Wichtelwald se guían siempre por las necesidades y las capacidades específicas de los niños. El objetivo consiste en prestarles apoyo en su trayectoria para convertirse en adultos independientes. En función del desarrollo individual, los niños pasan de la guardería a la escuela infantil en torno a los tres años. Al igual que en la etapa inicial, la transición se produce por fases a lo largo de un período de tiempo relativamente largo. Además, en el último año de escuela infantil, se prepara a los alumnos preescolares para el siguiente paso con tareas especiales encaminadas a potenciar las habilidades motrices, sociales, emocionales y cognitivas.
¿Y qué opinan los niños sobre “su”
Wichtelwald?
“Me gusta mucho estar en Wichtelwald porque también estuve en la guardería de aquí. Hago manualidades y me lo paso muy bien con mis amigos. Me encanta salir de paseo con ellos. ¡Y la alfarería se me da genial!” – Florentina
“Me encantan los juguetes de aquí, sobre todo cuando juego con mis amigos. ¡El gimnasio y la zona de juegos son lo más!” – Bella
“La comida aquí es genial; y es que me encanta la carne. Además, aquí podemos hacer mogollón de manualidades. También me gustan mucho el jardín, que es precioso, y el gran bosque”. – Leopold
“Lo que más me gusta es el gimnasio, y también me encanta la comida, sobre todo la ensalada que preparamos con las hortalizas de nuestro propio huerto. Y el jardín me gusta porque podemos hacer carreras de coches allí”. – Leo
“Me encanta jugar y pintar aquí. El aula de actividades es mi sitio favorito, y me encanta comer con los niños de la escuela infantil”. – Leni